Lasaña de pesto, patatas, jamón york y requesón

Hoy sí que sí hemos triunfado en Thermorecetas con esta súper receta. Una lasaña diferente, cremosísima, llena de sabor y de matices… es completamente adictiva, os lo podemos asegurar: lasaña de pesto, patatas, jamón york y requesón.

Se prepara súper rápido. Lo primero es que está absolutamente deliciosa. Y, después, es que es una receta muy socorrida y muy fácil. Lo importante es que usemos ingredientes de muy buena calidad. Os cuento los trucos para que os salga una lasaña de 10:

  • LASAÑA FRESCA: yo compro directamente en el supermercado láminas de lasaña fresca. La encontraréis en los refrigeradores donde ya venden la pasta fresca. Os lo recomiendo 100% porque tiene un sabor y una textura inigualables y porque os vais a evitar tener que cocer las placas previamente. Es cierto que venden planas precocidas, pero a mí no me gusta mucho el resultado porque absorben mucho líquido durante el horno y la lasaña no queda tan cremosa y jugosa como con las láminas frescas.
  • PESTO: aquí hay muchas opciones. Podéis aprovechar una receta de presto que hayáis preparado para otra cosa y aprovechar lo que os ha sobrado. Podéis preparar vuestro propio pesto casero (¡el que más os guste!) con cualquier fruto seco y también podéis comprarlo hecho. Aquí va a depender del tiempo y ganas que tengáis en cada momento. Con cualquier opción os va a quedar super bien.

Aquí os dejamos unas recetas para que preparéis vuestro pesto casero:

9 salsas pesto con todo el sabor de Italia

Con este recopilatorio de 9 salsas pesto tendrás muchas y buenas ideas para preparar tus platos de pasta, arroz o deliciosos aperitivos.

  • PATATAS: es muy importante que las cortéis super super finitas. Si tenéis mandolina mejor, y si no, con un cuchillo bien afilado. Tienen que ser muy muy finas, todo lo finas que podáis, porque si no, no se cocinarían bien en el horno y nos quedarían algo duras.
  • REQUESÓN: podéis usar requesón, ricotta o queso fresco desmenuzado con las manos ¡lo que más os guste o lo que tengáis más cerca!
  • BECHAMEL: para que tenga esa jugosidad es muy importante que la bechamel sea súper líquida y que haya buena cantidad. Yo utilizo 700 ml de leche y una proporción más pequeña de harina de lo habitual, porque así luego nos quedará muy muy cremosa.

¿Qué molde usamos?

Mi truco está en buscar el molde del tamaño en el que mejor pueda poner dos láminas por capa.

¿Cuántas capas le ponemos a la lasaña?

Esto realmente depende de cómo os guste. ¿Mi consejo? Hacer sólo 3 capas de lasaña para que no quede excesivamente alta. Sería una de base, la intermedia del relleno y la de arriba. Nada más. Para mí en las lasañas, menos es más sin ninguna duda.

 

Y aquí os dejamos la videoreceta para que no os perdáis ningún detalle.