Trigo sarraceno con champiñones y nueces

Hoy os traigo una receta con un ingrediente muy especial: trigo sarraceno con champiñones y nueces. Un platazo con sabor otoñal y que además es sin gluten, sin lactosa y vegano.

Es una receta sencillísima, muy nutritiva y que tendrás lista en unos 20 minutos. Además, aunque tenga sabor a otoño, la podrás hacer durante todo el año porque sus ingredientes están siempre disponibles.

Además es una receta que podrás hacer con antelación y llevártela fácilmente al trabajo.

¿Quieres saber más cosas sobre el trigo sarraceno con champiñones y nueces?

El trigo sarraceno o alforfón es un pseudocereal con un aporte nutricional superior al resto de los cereales y que además aporta minerales y antioxidantes.

Es un ingrediente imprescindible en herbolarios y tiendas especializadas y que cada vez es más fácil de encontrar en supermercados. Suele estar en la sección de nutrición o de productos para intolerancias alimentarias.

Aunque, para mí, lo mejor es que no tiene gluten.

Sí, como lo oyes…no tiene gluten.

Sí, ya se que se llama trigo y que el trigo tiene gluten. Pero como te comentaba antes, el trigo sarraceno no es un cereal, tampoco es una semilla. Es un pseudocereal como la quinoa y lo puedes tomar sin ningún problema aunque seas celíaco o intolerante al gluten.

Otro día os hablaré en profundidad de este ingrediente pero, de momento, quédate con la idea de que es sencillísimo de cocinar y que te servirá para llevar una dieta más rica en nutrientes.

Para hacer esta receta tienes 2 opciones: remojar o cocer el trigo sarraceno.

Yo he optado por ponerlo a remojo porque así se eliminan los fitatos o «antinutrientes» que son compuestos que inhiben la absorción correcta de los minerales.

Y, además, se reduce el tiempo de preparación de la receta, convirtiéndola en una receta sencillísima y rápida. De hecho, si pruebad un grano remojado verás que ya está blandito.

Pero, si no has dejado el trigo sarraceno a remojo y tienes antojo de hacer esta receta, no tienes de que preocuparte. Solo tienes que enjuagar el trigo sarraceno y ponerlo a cocer como si fuera arroz.

Pon agua a calentar y cuando rompa a hervir añade el trigo sarraceno ya escurrido. Cuece durante 12 minutos o hasta que blando pero firme. Escurre y listo para usar en la receta.

Las sustituciones:

Puedes cambiar la cebolla por puerro e, incluso, por puerro y apio.

Las nueces las puedes cambiar por cualquier otro fruto seco. Las avellanas también le van muy bien a esta receta. Prueba también con castañas asadas para potenciar el sabor a otoño.

El caldo de verduras lo puedes sustituir por agua con un poco de caldo deshidratado casero. Aquí te dejo 2 recetas fantásticas, una vegana y otra vegetariana, para tener siempre a mano:

Receta básica: Pastillas de caldo concentrado de verduras

Estas pastillas de caldo concentrado de verduras son fáciles de hacer y nos servirán para enriquecer nuestros platos caseros.

Concentrado casero de verduras en polvo

Concentrado casero de verduras en polvo es sano, muy fácil y rápido de hacer y además no lleva conservantes ni colorantes artificiales.

La sal de setas viene muy bien para este tipo de platos pero, si no tienes, puedes usar sal normal.

El sésamos y las nueces sirven para añadir algo crujiente al plato. Si no quieres o no tienes en casa, no pasa nada.