Mermelada de calabacín y manzana
La mermelada de calabacín y manzana es una manera sencilla de disfrutar de una conserva casera hecha con frutas y verduras.
Sus ingredientes combinan a la perfección formando una receta genial para darle sabor a las tostadas de tus desayunos.
Además es ideal para darle salida a la producción estival de tu huerto y poder disfrutar de su sabor durante todo el año.
Mermelada de calabacín y manzana
Una mermelada con las podrás conservar los sabores del verano y darle salida a la producción de tu huerto.
¿Quieres saber más cosas sobre esta mermelada de calabacín y manzana?
Una de las primeras cosas que has de saber sobre esta receta es que puedes cambiar el azúcar por azúcar de abedul o xilitol que tiene un índice glucémico más bajo.
También puedes reducir la cantidad pero no te puedo asegurar de que el resultado sea el mismo porque el azúcar juega un triple papel en las conservan: da dulzor, ayuda a espesar y es el responsable de la conservación.
Así que, si cambias el porcentaje, está claro que también estarás modificando el resultado pero eso ya depende de cada uno.
Ya sabes que si quieres conservar esta mermelada durante meses en la despensa tendrás que envasarla al vacío. Otra alternativa que también funciona muy bien es congelarla.
Puedes utilizar tanto calabacines blancos como verdes. No hace falta que los peles pero si ves que tienen un sabor muy fuerte puedes retirar algunas tiras de la piel.
También con las manzanas puedes usarlas peladas o sin pelar. Aunque tendrás que vigilar el tiempo de cocción porque la piel tiene más pectina y la mermelada se espesará antes.
Para aromatizarla puedes usar tanto vainilla como canela. Yo te recomiendo que la añadas al final de cocción para conseguir un sabor más auténtico.
Más información – Hogaza con masa de pan enriquecida / Cómo pasteurizar y conservar al vacío
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